Nuestra historia

Preservar la masonería en su origen

La historia de la confederación de las «Grandes Logias Unidas de Europa y el Mediterráneo» comienza a principios del nuevo milenio. El origen se justificó con la necesidad de mejorar la idea básica masónica y una vuelta a los hitos, que en aquella época estaban expuestos a una fuerte influencia del lado comercial en muchas obediencias. Muchos masones ya no querían seguir este tipo de trabajo de logia, determinado por la política y la influencia del poder. En muchos lugares, hubo una salida o reorientación, parecía necesario construir un nuevo techo.

Preservar la forma original de la Francmasonería y adaptarla cuidadosamente a las exigencias actuales de nuestro tiempo tuvo como resultado final la fundación de la «Confederación de Grandes Logias del Mediterráneo y el Sur de Europa» en 2003. Los estatutos de la nueva confederación CGLMES se ratificaron finalmente en Lisboa en 2006. Pronto se integraron nuevos países y rápidamente quedó claro que en otras partes de Europa y del Mediterráneo también existía la necesidad de devolver a la masonería su rostro original con pequeños ajustes que permitieran una conexión con nuestra vida moderna.

Unos cinco años después de la fundación de la Confederación, se hizo necesario adaptar la apariencia externa a las exigencias actuales, lo que dio lugar al término «Confederación de Europa y del Mediterráneo», CGLEM para abreviar.